Nísperos su futuro, el vino.

 

¿Qué sabemos de los nísperos?, que sus raíces son del sudeste de China y Japón y que pertenecen a la familia Rosaceae, que es la misma que incluye manzanas, peras y melocotones. 

La marca más famosa en España es la Ruchey, reconocida por su alta calidad de sus nísperos, con denominación de origen en Callosa d'en Sarrià, Alicante y cuya cooperativa produce millones de kg de nísperos al año que se distribuyen tanto a nivel local como internacional. (Si quieres saber más aquí su enlace Ruchey). 

Aunque si los quieres probar no es necesario ir hasta Alicante. En nuestra tienda en Parets del Vallès los puedes probar.

Sin embargo de lo que me apetece hablar hoy es de su futuro. Y es que se esta trabajando en una fermentación experimental, que aunque no es común, ya se están realizando investigaciones sobre la fermentación de frutas como el níspero para producir vinos frutales. Esto implica procesos similares a los del vino tradicional, pero con un perfil de sabor único.

La fermentación experimental de nísperos abre un mundo fascinante de posibilidades en la enología. Este proceso utiliza la fruta para desarrollar vinos con un perfil aromático y gustativo distintivo. Los nísperos, debido a su equilibrio entre dulzura y acidez, son ideales para crear vinos frutales con notas cítricas y tropicales.

Algunos aspectos interesantes de esta fermentación se basan en ajustar factores como los niveles de azúcar y la temperatura para maximizar el potencial de la fruta. El níspero aporta un perfil de sabor único al vino, gracias a sus características naturales. Influyendo en sus notas aromáticas, pues tienen un aroma fresco y afrutado, con toques cítricos y tropicales, que pueden trasladarse al vino, haciéndolo más vibrante y refrescante. Además jugando con su equilibrio de dulzura y acidez aporta un balance interesante al vino, resaltando tanto los sabores dulces como los más ácidos. Esto puede resultar en un vino con un carácter ligero y versátil.

El uso del níspero en la elaboración del vino es una práctica innovadora y en fase de desarrollo, pero no descartéis verlo pronto en tu bodega de proximidad.

Así que bienvenida sea la innovación, la fruta y el buen vino. ¡Salud!

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Como siempre, aquí os dejo sus propiedades principales:

1. Vitaminas:

   • Rica fuente de vitamina A, esencial para la salud ocular y el sistema inmunológico.

   • Contiene vitamina C, que contribuye a la salud de la piel y actúa como antioxidante.

2. Minerales:

   • Alto contenido de potasio, que ayuda a regular la presión arterial y la función muscular.

   • También aporta calcio y magnesio, importantes para los huesos y el sistema nervioso.

3. Fibra dietética:

   • Los nísperos son ricos en fibra, lo que favorece la digestión y ayuda a mantener la sensación de saciedad.

4. Bajo en calorías:

   • Por cada 100 gramos, los nísperos tienen aproximadamente 50 calorías, lo que los convierte en una fruta ideal para incluir en dietas.

5. Antioxidantes:

   • Contienen compuestos antioxidantes que protegen las células del daño causado por los radicales libres, ayudando a prevenir el envejecimiento prematuro y enfermedades crónicas.

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Y  un par de recetas

🍑Nísperos al vino tinto

Ingredientes:

• 500 g de nísperos (pelados y sin semillas)
• 250 ml de vino tinto
• 100 g de azúcar
• 1 rama de canela
• 1 clavo de olor
• La cáscara de medio limón (sin la parte blanca)

Instrucciones:

1. En una olla, coloca el vino, azúcar, canela, clavo y cáscara de limón. Lleva a ebullición y cocina a fuego lento por 5 minutos.
2. Agrega los nísperos pelados y cocina a fuego bajo durante otros 10-15 minutos, hasta que estén suaves pero mantengan su forma.
3. Retira los nísperos y reduce el líquido hasta que quede un almíbar espeso.
4. Sirve los nísperos bañados en el almíbar y acompáñalos con helado de vainilla o crema batida.

🍑Mermelada de nísperos

Ingredientes:

• 1 kg de nísperos (pelados y sin semillas)
• 500 g de azúcar
• Jugo de 1 limón

Instrucciones:

1. Corta los nísperos en trozos pequeños y colócalos en una olla grande.
2. Añade el azúcar y el jugo de limón, mezcla bien y deja reposar por 30 minutos para que suelten jugos.
3. Cocina a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que la mezcla espese (alrededor de 40-50 minutos).
4. Deja enfriar y tritura si deseas una textura más suave. Guarda en frascos herméticos y esterilizados.

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Y para el final os dejo una sorpresa para las mentes más audaces...y pacientes pues el proceso puede durar meses. Hacer vino con nísperos en casa. 

Aquí tienes una guía básica para empezar:

Ingredientes necesarios:

• Nísperos: Alrededor de 3-5 kilos, bien maduros, para obtener más azúcar y sabor.
• Azúcar: Para potenciar la fermentación (aproximadamente 1 kg, ajustable según el nivel de dulzura deseado).
• Levadura para vino: Disponible en tiendas especializadas.
• Agua: Preferiblemente agua pura sin cloro.
• Jugo de limón: Para ayudar a equilibrar la acidez.

Equipamiento: 

• Un recipiente de fermentación con tapa
• Un airlock (válvula de fermentación)
• botellas para almacenar el vino.

Pasos básicos:

1. Preparar los nísperos: Lava y pela los nísperos. Retira las semillas y machaca la pulpa para formar un puré.
2. Crear la mezcla: Combina la pulpa de nísperos con agua, azúcar y jugo de limón en el recipiente de fermentación. Asegúrate de que haya suficiente espacio para que los gases se liberen.
3. Añadir la levadura: Agrega la levadura para vino, siguiendo las instrucciones del paquete. Revuelve suavemente para integrarla.
4. Fermentación inicial: Cierra el recipiente con su tapa y el airlock, para evitar contaminaciones. Deja fermentar en un lugar oscuro y a una temperatura estable (aproximadamente 18-24°C) durante 7-14 días.
5. Filtrar: Una vez terminada la fermentación inicial, filtra el líquido para separar la pulpa y las impurezas.
6. Fermentación secundaria: Transfiere el líquido filtrado a otro recipiente, con un nuevo airlock, y deja fermentar por varias semanas o meses según el sabor deseado.
7. Embotellado: Una vez que el proceso de fermentación haya terminado, transfiere el vino a botellas limpias y séllalas bien. Deja que envejezca durante algunos meses para mejorar el sabor.

¡Y listo! Tendrás tu propio vino de nísperos casero. ¿Te animas a intentarlo? 

Es importante recordar que este es un proyecto artesanal y la calidad puede variar según los ingredientes y condiciones. Si decides embarcarte en esta aventura, ¡no dudes en contarme cómo te va!